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martes, 22 de mayo de 2018

Una experiencia inolvidable (1-0)

Les voy a contar una historia un poco enrevesada: Yo tenía intención de ir a un partido esta temporada. Fui a preguntar al club dónde estaban las localidades para discapacitados y me llevé una sorpresa muy desagradable: Todas estaban abonadas. No había nada que hacer (o eso creía yo)...

"¿Cómo puede ser esto?", me pregunté llorando a lágrima viva. Escribí a dos personas por Whatsapp y, al rato, una de ellas me llamó.

No era una persona cualquiera, sino don Antonio Álvarez Giráldez. Ahí ya me derrumbé del todo y le conté el chasco que me acababa de llevar bien contado (ya saben ustedes que por Whatsapp no se entera uno muy bien de las cosas importantes). Escuché: "Tranquila, que yo te invito, que no hay problema". Totalmente en shock, le di las gracias. Colgué y empecé a llorar de alegría...

Yendo hacia el estadio, me crucé con el mismísimo Rafa García (conocido en las redes más como "El Talibán"). Nos hicimos unas cuantas fotos.

Llegué al estadio, donde me recibió nuestro delegado de campo (mi querido Paco García Payán). Me tenía una sorpresita preparada: Una bufanda y una gorra de la línea femenina y... ¡¡¡una camiseta con mi nombre!!! Yo me iba a morir... Vi a Manolo Jiménez, pero no pude saludarlo porque iba con más gente y me daba cierto apuro. Me fui para mi zona y fui entrando y saliendo según veía que llovía menos o más. Pasó por delante de la zona habilitada para discapacitados físicos el mismísimo Enzo Maresca. Lo paró un chico que estaba a mi lado y luego lo paré yo. Tuve que aguantarme la emoción.

Caparrós apostó de inicio por David Soria, Layún, Nico Pareja, Lenglet, Sarabia, Roque Mesa, N'Zonzi , Franco Vázquez, Sandro, Nolito y Ben Yedder.

Me gustó el once muchísimo. El debut de Lara en Primera es una experiencia que no se le va a olvidar al chaval.

David Soria nos salvó, Ben Yedder marcó su gol y Del Cerro Grande se lesionó. Lo vi cojear muchísimo, probarse mientras calentaba López Puerta y hacerse cargo de anunciar los cambios con un aparatosísimo vendaje.

Pero lo que vi acabado el partido no se me va a olvidar en la vida:

-Dentro del césped vi a Pareja llorando (no quiero ni pensar que fuera su último partido con la camiseta del Sevilla) y a Caparrós (hecho una sopa y llorando a lágrima viva) agradeciendo a la afición el cariño que le hemos dado durante el tiempo que ha estado en nuestro banquillo esta temporada.

-Fuera del césped, pasó algo mágico: Primero volví a recibir a mi amigo Paco García Payán, pero no iba solo... ¡¡¡Iba con Antonio Álvarez!!! Fotos, abrazos, una larga conversación y un regalito: Tres pins con nuestro escudo y dos réplicas del "Dorsal de Leyenda" que recibió en 2016. Yo creía que me moría, queridos lectores... Aguanté la emoción como pude. Pasó Escudero por delante de mí y mi reacción fue pararlo para saludarlo y hacernos unas fotos. Pude ver también a Luci Martín (no me atreví a pararlo porque iba con su familia).

Hasta me entrevistaron para Canal Sur Radio. Fue mi amigo Jesús Márquez. Yo no tenía ni santa idea de que aquello iba a suceder...

Ya iba bien preparada de mi casa. Llevaba una bufanda que tiene un valor sentimental incalculable. Perteneció a Don Enrique Caro (¡ahí es nada!), padre de mi queridísima amiga Lourdes. También llevaba mi pin con el escudo del Sevilla y otro con el escudo del Sevilla Atlético.

Les dejo la galería de fotos:































Si hubiéramos perdido, ya les digo que me hubiera importado muy poco.

O nada, fíjense.

¡Qué feliz, de verdad!

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