Esperaron una oportunidad en el banquillo Sergio Rico, Fernando Navarro, Diogo, Reyes, Iborra, Denis Suárez y Gameiro, mientras que los jugadores que se quedaron en la grada fueron Kolodziejczak, Arribas, Deulofeu y Aspas.
Les dejo el resumen de la web oficial (yo sigo sin poder decir otra cosa que no sea: "¡Qué grande eres, Sevilla!"):
El Sevilla FC ejerció una vez más como campeón de la Europa League. Sólo los grandes equipos son capaces de moverse con su destreza en una situación tan adversa como la que tuvo que lidiar esta noche en San Petersburgo. El campeón ya está en semifinales, después de salir vivo de una locura de partido, que se descontroló en la reanudación, tras una primera parte en la que se desempeñó con mucho oficio. Sin embargo, en la segunda mitad dos acciones desafortunadas de Beto, que luego salvó dos ocasiones providenciales, pusieron la eliminatoria en serio peligro, con el Zenit lanzado, dinamitando de pólvora el área nervionense en un tramo final que invitaba a la tragedia. Pero entonces, cuando el sueño de Varsovia se desmoronaba minuto a minuto,apareció la sangre fría de este Sevilla imperturbable. Banega lanzó una contra, abriendo a Vitolo, el canario la puso al área, Iborra dejó correr la bola y Gameiro la enganchó, cruzándola con el alma. Y con ese fulminante disparo del francés, un nuevo paso adelante en Europa, una vez más en un Jueves de Feria, sufriendo, pero ganando, que es como sufren los campeones.
Pocos podían pensar un desenlace tan ajustado cuando comenzó el partido. El Sevilla se puso muy pronto por delante, haciendo buena su mejor arma, esas contras fulgurantes que le convierten en un equipo inapelable cuando toma las espaldas a su rival. Así machacó al Borussia en dieciseisavos y así eliminó al Zenit en cuartos. Una rápida salida de Banega, fundamental en el manejo de los tiempos del choque, acabó con Vitolo provocando un penalti, que Carlos Bacca culminó sin temblarle el pulso. No se podía poner mejor la cosa. Cariacontecido, el Zenit se rehízo como pudo, construyendo sus ofensivas casi siempre a través de Danny. Un disparo del capitán de los rusos fue sacado con una mano salvadora de Beto. El Zenit tenía la pelota, pero el Sevilla era en realidad quien ponía las ocasiones. El equipo tiraba de oficio y jugaba relativamente cómodo en el campo, pese a la lesión de Pareja, que obligó a reajustar las piezas a Unai, poniendo a Krychowiak de central y sacando a Iborra. Aleix Vidal, pero sobre todo Bacca, que vio como Smolnikov le sacaba un gol en la raya con Lodigin rebasado, tuvieron la sentencia de la eliminatoria. Pero no, habría que esperar, y sufrir, mucho más de lo pensado.
Lo que podría haber pasado o no si a Beto no se le resbala el cuero en el inocente centro de Shatov, nadie lo sabe ni lo sabrá. Pero la realidad es que esa acción puntual del meta, que aprovechó Rondón, metió al Zenit en un partido al que se había mostrado incapaz de meterle mano. El Zenit fue subiendo las revoluciones y al Sevilla le tocaba resistir como podía. Mbia se multiplicaba para tapar agujeros, pero el partido se orientaba a un peligroso correcalles que beneficiaba claramente a los locales, lanzados por el ambiente. Hulk tomó el mando y Beto salvó un disparo del brasileño descomunal, pero en cambio el punta le ganó la partida con un tiro lejano, que una vez más en boca de gol remachó Rondón. Al Sevilla se le escapaba un pase a semifinales que al descanso parecía totalmente encauzado.
El Zenit olía la sangre y quería resolver antes de la prórroga. Emery agitó el banquillo, sacando a Gameiro por Bacca, para aprovechar la velocidad del francés en una posible salida. Y una vez más el técnico hizo diana desde el banquillo, porque fue el francés quien castigó el desmedido ímpetu de los rusos, que jugaban como si no hubiera mañana. El Sevilla resistía el asedio como buenamente podía, con Beto salvando ante Rondón en una jugada clave, con la defensa achicando aguas continuamente, pero sobre todo con mucha sangre fría para salir a la contra a cinco del final y apuntalar al Zenit. Todo empezó con una apertura de Banega magnífica hacia Vitolo, que enfiló aprovechando los espacios y la puso al área, Iborra dejó pasar y apareció Gameiro, sacando su fúsil y agujereando la meta de Lodigin. El francés le pegó con el corazón más que con la diestra. Y tanto él, como el resto de sus compañeros, salían disparados hacia Beto, que lo pasaba mal, para celebrar el tanto que daba el pase con un portero, que había acertado en lo más difícil y errado en lo más llano. Se gestaba una imagen admirable, preciosa, pero fundamentalmente ejemplarizadora, porque refleja el espíritu de equipo de este Sevilla indomable, de este Sevilla que sabe sufrir incluso ante rivales superiores, que sabe sobreponerse a las peores circunstancias, y que, sobre todo, a la contra es demoledor y si se le deja, como esta noche, te mata. Era Jueves de Feria y en ese día tan señalado, con Antonio Puerta en el recuerdo, no cabía otra que seguir adelante y agrandar la leyenda de Nervión en el viejo continente.
El susto gordo de la noche lo dio Nico Pareja. Al ver que entraron las asistencias médicas, el tipo de exploración que le hicieron y los gestos de dolor, ya me imaginaba la lesión que tenía, pero no ha sido hasta hoy cuando se ha confirmado:
Tuvo que abandonar el terreno de juego apenas quince minutos después del inicio del choque ante el Zenit y en la mañana de hoy, tras realizársele las pruebas pertinentes, se ha confirmado que Nico Pareja sufre una rotura del ligamento cruzado anterior y esguince grado 2 del ligamento lateral externo de su rodilla derecha.
Una lesión que requiere de intervención quirúrgica, con fecha aún por determinar, y que le tendrá KO un tiempo estimado de entre seis a siete meses.
Vitolo, que acabó con molestias el encuentro de anoche en Rusia, sufre una pequeña rotura fibrilar de isquiotibial izquierdo y el tiempo de baja dependerá de su evolución, aunque se espera que esté disponible en una semana.
Hoy ha sido el sorteo de semifinales de la Europa League. Les dejo la información relativa al rival:
La Fiorentina será el próximo rival del
Sevilla FC en UEFA Europa League. Tras imponerse al Zenit en cuartos de
final, los de Unai Emery se medirán al conjunto italiano en semifinales.
La ida, en el Ramón Sánchez Pizjuán el 7 de mayo a las 21.05 horas. La
vuelta, en el Estadio Artemio Franchi el 14 a la misma hora. También se
sorteó en Nyon las condiciones de local y visitante de cara a la final
de Varsovia y el Sevilla FC, de lograr el pase a la final, actuaría como
visitante.
El Sevilla ya se encuentra en
semifinales de su competición. La Europa League ha vuelto a encumbrar a
un equipo al que prácticamente nadie quería en el sorteo. Así las cosas y
a estas alturas de competición ya no quedaban peritas en dulce. La
Fiore será el rival de un Sevilla que se reencontrará con dos
futbolistas que conocen muy al equipo de Emery, como es el caso de
Joaquín o Borja Valero, en su día vinculado al equipo nervionense, son
algunas de sus grandes figuras. Sin duda, la Fiorentina es uno de los
grandes de Italia. Así lo dice el que tenga dos Ligas en sus vitrinas,
además de seis copas de Italia.
En este sentido, el conjunto viola
llega a estas semifinales tras haber eliminado al Dinamo de Kiev,
conjunto al que venció en casa por 2-0 con goles de Mario Gómez y
Vargas.
La Associazione Calcio Firenze Fiorentina, mejor conocida como
Fiorentina, fue fundada el 29 de agosto de 1926 -y siendo refundado el 1
de agosto de 2002- bajo el nombre de Associazione Calcio Firenze.
Cuenta con orgullo que es el equipo italiano que participa en la máxima
categoría de forma ininterrumpida desde la temporada 2004-05 y que es
el quinto equipo italiano con más presencias en la competición desde su
instauración en 1929. A lo largo de su historia ha conquistado dos
scudettos en las temporadas 1955-56 y 1968-69. Su palmarés nacional se
completa con seis campeonatos de Copa y una Supercopa, siendo una de las
instituciones futbolísticas más importantes y reconocidas en el país
transalpino.
En cuanto a Europa se refiere, el conjunto morado fue el primer
equipo italiano en vencer en una competición organizada por la UEFA tras
la obtención de la primera edición de la Recopa de Europa, siendo
además uno de los trece clubes del viejo continente que ha disputado al
menos una vez la final de las tres principales competiciones organizadas
por el máximo organismo europeo: la Copa de Europa, la Copa de la UEFA y
la ya mencionada Recopa de Europa, manteniéndose éste como el único
trofeo internacional logrado por el club. Identificado por su color
violeta -del que recibe el apelativo de «viola»- disputa sus encuentros
como local desde 1931 en el Estadio Artemio Franchi -denominado en su
fundación como Stadio Giovanni Berta-, el cual cuenta con una capacidad
aproximada de 47.300 espectadores, el sexto de mayor capacidad de
Italia. El recinto es considerado como una de las obras arquitectónicas
más influyentes y destacadas de la ciudad.
Próximo partido: Sevilla-Rayo el domingo a las 19:00.
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